Tu

La agudeza de tu mirada cautiva mis sentidos
El néctar de tus besos sacia mi dolor
Tus carisias calman la tortura de vivir
Tus palabras embelezan mis oídos
Tu aliento da vida a mi ser
Tu calor desvanece el invierno de mi corazón
La pasión por ti quema mi alma
Mientras el deseo por tu ser inunda mi razón
Herejía de mis manos al tocarte
Sorna de mis labios que te besan
Ironía la mía al amarte

carta a las madres

DIOS PENSO
PENSO EN TERNURA, LE DIO BRAZOS PARA ABRAZAR
PENSO EN APOLLO, LE DIO SUS PALABRAS. QUE SIMPRE AYUDAN EN MOMENTOS DESPERADOS
PENSO EN AMOR, Y CREO SU REGASO LECHO DE AMOR Y TERNURA CAPAS DE FORMAR CALOR QUE RECOMFORTA HASTA EL HOMBRE MAS DEMACRADO
PENSO EN DEDICACION, Y CREO SUS MANOS CAPACES DE LOGRAR LO IMPOSIBLE


DIOS HIZO
HIZO LA PUREZA EN VIDA, EL AMOR QUE CAMINA LA TERNURA QUE TOCA LA PIEL CON LA INOSENCIA DE LA DE UN NACIMIENTO


DIOS VIO
VIO EL SOL, CREO SU SONRISA QUE ALUMBRA SIN ENCANDILAR
VIO UN FRONDOSO BOSQUE, CREO SU MIRADA
VIO A UN BUHO PENSANDO, CREO SU MENTE CONCENTRADA Y A LA VEZ DISTANTE CAPAZ DE CONTESTAR CUALQUIER PREGUNTA SIN REDONDEOS

PENSO EN SI MISMO Y CREO EL AMOR INFINITO EN UN MORTAL

DIOS CREO A LA MADRE

Destellos

En la obscura soledad que envuelve mi alma tus destellos de amor alumbran mi rostro
El reflejo de tu cariño mata las tinieblas que mancillan mi espíritu
Tu luz evita que las tinieblas carcoman mi carne y rompan mis huesos
La verdad en tus palabras refresca ni vida
Y el consuelo de tus brazos apaga mi dolor y tus labios sanan las heridas que el tiempo creo en mi piel

Tiempo

Mortíferos segundos pasan ante mi, agotando las arenas de mi vida, grano por grano
Cada minuto se convierte en un universo infinito de tristeza y obscura nebulosa de pensamientos, paridos por mi insolente razón llena de acertijos dolorosos, aunado a la cansina de mi mente confabulando nuevas ideas de absurdos cuerpos y deformes razones.
Largas horas asedian mi deslucida cabeza con dolor llenan mi espacio de turbios pensamiento habidos de maldad y depravación.
Ahora en la derrota de mi vida surgen del averno sombrías figuras que mancillan mi pensar hacia la negra noche de la eternidad infernal

Derrota

El sabor del fracaso quema mi boca
El color azul en cielo vislumbra mi desilusión en tonos de melancolía
Mi alma se deja abatir por la derrota
Mi espíritu se quiebra en agonía por la derrota sin esperanza muere
Mi vista se posa en la tierra que acoge mis lágrimas
Mi orgullo y dignidad ahora están desvanecidos en el espesor de mi miseria
Vuelvo al inframundo, en donde tantas veces eh estado, vuelvo al dolor de la no vida